El sueño pasa por Rusia

El Mar Alicante se impone al poderoso Rostov Don (24-22) en la ida de los cuartos de final de la Recopa

C. PASCUAL 

Una victoria con regusto amargo. El Mar Alicante se impuso ayer al Rostov Don (24-22) en el partido de ida de los cuartos de final de la Recopa de Europa. Así, las de Ángel Sandoval deberán defender una renta de dos goles en el decisivo encuentro de vuelta que se disputará el próximo domingo en Rusia. Sin embargo, la victoria ante el poderoso rival quedó empañada por el parcial de 2-8 que consiguieron las visitantes en la recta final del encuentro y que les deja con vida tras ir ocho abajo a falta de apenas veinte minutos para el final.

La actuación de Isa Ortuño, una vez más, y de Bea Morales resultó fundamental para el Mar Alicante, que vio cómo su escaso "fondo de armario" le impidió mantener la intensidad defensiva en los instantes más decisivos de un encuentro que congregó a más de un millar de aficionados en el Pitiu Rochel de Alicante. 

El choque arrancó con un intercambio de goles, que se prolongó hasta que el cronómetro rebasó el ecuador del primer acto. La lateral zurda alicantina, Isa Ortuño, se encargó de inaugurar el marcador electrónico del pabellón y ya desde el inicio se erigió en la referencia en el ataque local. La eldense anotó cuatro de los primeros cinco goles de un Mar Alicante que mandó, con mínimos parciales, en la fase inicial del encuentro.

La primera ventaja visitante llegó en el minuto 12, a través de un tanto de la rusa Petrova, que ponía el 5-6 en el electrónico. No obstante, el conjunto de Ángel Sandoval apenas tardó en neutralizar la ventaja visitante y volvió a retomar el mando del, hasta ese instante, igualado choque. Ayudado por la primera exclusión en las filas del Rostov, de las siete que sufrió a lo largo del encuentro, el Mar Alicante volvió a ponerse por delante con dos goles consecutivos de Bea Morales. 

A falta de cinco minutos para el final de la primera parte, llegó una ventaja significativa para las locales (13-9), tras dos acciones defensivas notables que permitieron sendas rápidas transiciones culminadas por Craciun y una inspirada Bea Morales. Al descanso, tres arriba para las jugadoras alicantinas (14-11).

Tras el paso por vestuarios, el Mar Alicante disfrutó de sus mejores minutos sobre el parqué. Una espectacular defensa unida a una efectiva actuación en ataque permitió que las locales dieran una lección de balonmano. Las jugadoras del Rostov, superiores sobre el papel, veían cómo la ventaja local en el marcador crecía con el paso de los minutos. 

Un parcial de 6-1 para el Mar Alicante en el arranque de la segunda parte puso la máxima diferencia del partido (20-12). En poco más de diez minutos, las locales aumentaron progresivamente su ventaja provisional, que pasó de los cuatros goles del descanso a los ocho tras un tanto de Cristina Barrios, que, además, dejó en inferioridad al conjunto ruso tras una nueva exclusión. 

Y ahí, cuando el banquillo alicantino empezó a creerse que era factible cumplir los mejores deseos y alcanzar la suficiente holgura en el marcador para viajar a Rusia con garantías de acceder a las semifinales, el Rostov comenzó a imponer su "fondo de armario" y a recortar, hasta el final, su amplia desventaja. 

El enorme esfuerzo físico de las jugadoras de Ángel Sandoval pesó, y mucho, en el último cuarto del intenso encuentro, en el que pasaron de manejar una máxima renta de ocho goles a una exigua ventaja de dos tantos.

En los últimos 18 minutos del choque, el Mar Alicante apenas pudo perforar en cuatro ocasiones la meta defendida por Gabisova, una labor repartida en Bea Morales, De Sousa, Tobiasen y Laima. Mientras que Linda Pradel, encargada de defender la meta alicantina, recogió en diez ocasiones el balón de entre las mallas. Pudo ser peor, pero la meta francesa desbarató el último ataque ruso. La vuelta, el domingo en Rostov.

fuente :http://www.diarioinformacion.com/balonmano/2011/03/14/sueno-pasa-rusia/1104479.html